3) RESTOS DE UN PASADO COMÚN.

(Similitudes de las mitologías cantábricas)

 

Aunque yo no crea en ellas, habelas... hailas”

“Direnik, ez da sinistu bear; ez direla, ez da ezan bear” (“No se debe creer que existen, pero no hay que decir que no existen”).

La única mitología cantábrica que conserva múltiples rasgos que podríamos calificar todavía como “pre-indoeuropeos” es la “vasca”. Y si es verdad que tiempo antes, todos estos pueblos tenían una cultura comun, podríamos identificar a la cosmovisión euskalduna como un ejemplo de la que antes estaba extendida por toda la región Cantabrico-Pirenaica.

 

Y eso es lo que parece a simple vista. La mitología asturiana y la cántabra guardan enormes similitudes de base con la vasca, aunque en las dos primeras (sobre todo en la cántabra) se noten ya grandes influencias del cristianismo (la serpiente como símbolo del mal...). Veamos los indicios. (Nota: Como podras comprobar a continuacion el metodo de trabajo que hemos utilizado para detectar estas similitudes ha sido simple y poco exhaustivo pues se trata de detectar indicios no de elaborar una tesis al respecto)

 

Gentil-Mairu (Euskal Herriak) // Xintil-Moro (Asturies) // Moro-Mairi (Pirineo)

 

Los moros o Xintiles. “En  Costumbres de matrimonio, Nacimiento y Muerte en Asturias una encuesta sobre tradiciones realizado por el Ateneo de madrid, hacia 1901-1902, vemos un dato muy interesante. En Lleitariegus, cuando bautizaban a un niño, la madre se lo daba a la madrina para que lo llevase a la iglesia. Una vez realizado el rito la madrina se lo devolvía, y se establecía el siguiente diálogo:

 

-          “Güei fixiste una obra de caridá”

-          “¿Purque comadri?

-          “Purque fixiste d´un moru un cristianu”

 

Vemos, pues, que la palabra “moru” se refiere al no bautizado, al pagano, que en otro tiempo era llamado xentil o gentil. Así la actual Cueva Los Moros en Salas, próxima a Regueira Cavada, era conocida antiguamente como Cueva de los Xentiles. Con el paso del tiempo esos Xentiles fueron asimilados como el pagano por excelencia, “el enemigo de la cristiandad”: El moro. Los moros seran, pues, los constructores de dólmenes, castillos (...)”. Alberto Alvarez Peña, “Mitología asturiana”.

 

Mairi. “En Baja-Navarra es designado así un genio dotado de fuerzas colosales, según creencia común. Según algunos es un tipo humano muy antiguo que vivió en nuestro país. Los Mairi transportaban a mano enormes peñascos de la montaña de Arradoy hasta los lugares donde construían castillos, dólmenes, etc. Las grandes cubiertas de piedra, tanto del Mairietxe “casa de Mairi” o dolmén de Gaxteenia (en Mendive) como del de Armiaga (de Behorleguy) fueron transportadas por una Mairi. Dicese que llevó sobre su cabeza mientras traía sus manos ocupadas en hilar”. J. M. Barandiarán, “Mitología vasca”

 

Moros. “En el Pirineo, son responsables de las construcciones megalíticas: dólmenes y cromlech construida por la gigantesca raza de los moros,  o de gigantes que transportan las piedras sobre sus cabezas. En el País Vasco los llaman Mairiak, y a los dólmenes, Mairietxe. La losa mora, en la Sierra de Guara está también construida por una giganta que lleva la piedra grande sobre la cabeza” “Los gigantes del Pirineo” (página Web)

Los Gentiles. “Los viejos genios fueron desterrados por las campanas de las ermitas cristianas, según contaron en Vizcaya a Barandiaran, y también se dice que los espiritus subterráneos dominadores del mundo antiguo fueron exterminados al ser construidas las iglesias y ermitas. Se cuenta asimismo que el fin de los gentiles aconteció un día en el que divisaron una nube luminosa que llegaba desde oriente a la Sierra de Aralar. Asustados, preguntaron a un anciano el significado de este fenómeno, y el exclamó que había llegado el fin de su raza por el nacimiento del Kixmi, y pidió que le arrojaran por el vecino precipicio. Los gentiles corrieron hacia Occidente, seguidos por la nube, y en el valle de Arratzaran se sepultaron bajo una gran losa que desde aquel día llama Jentillari (piedra de los gentiles), y es la que cubre el dolmen del mismo nombre” Ignacio Abellá, “La Magia de los Árboles”.

 

Basajaun (Euskal Herriak)-Busgosu (Asturies):

 

Baxajaun, señor de la selva, es el genio que habita en lo más profundo de los bosques o en cuevas situadas en lugares prominentes. Tiene cuerpo alto de forma humana, cubierto de pelo. Su larga cabellera le cae por delante hasta las rodillas, cubriendo el rostro, el pecho y el vientre. Es el genio protector de los rebaños (...) Otras veces se nos describe como el primer agricultor de quién aprendieron los hombres el cultivo de los cereales y como el primer herrero y el primer molinero, a quién robó el hombre el secreto de, la fabricación de la sierra, del eje del molino y del modo de soldar los metales”

 

“El Baxajaun fabricaba la sierra, según cierta leyenda de la región de Oyarzun; no así San Martinico, que carecía de modelo para ello. Deseando éste conocer el secreto, envió a su criado a anunciar en el pueblo que San Martinico había fabricado la sierra. Al oír esto, el Baxajaun le preguntó: “¿Es que tu amo ha visto la hoja del castaño?”. “No la ha visto; pero la verá” (contestó el criado, quién refirió después a San Martinico lo sucedido). De ahí se propagó la técnica de la fabricación de la sierra en el mundo”. Jose Miguel de Barandiaran, “Mitología vasca”.

 

Busgosu. “Se trata de un personaje de aspecto semihumano cubierto de pelo, enmarañado, patas y cuernos de cabra. Vive en lo más profundo del bosque y en las cuevas.”

“Existe una leyenda sobre la invención de la sierra que lo mismo la encontramos en Euzkadi referida a San Martinico y el basajaun y en Asturies sobre el Demo (el demonio) y el primer herrero.

 

Se cuenta que el primer ferreru en Asturies se dirigió a la cova´l Demo con la intención de robarle uno de sus secretos: La invención de la sierra. Para ello venció el temor que le inspiraba el Demo y le dijo que en el pueblo ya habían inventado la sierra a lo que este respondió:

 

-          “Eso xa que visteis la fueya ´l castañu”

-          “Nun la vimos pero xa la faeremos”

 

De vuelta al pueblo vieron la hoja dentada de los castaños y se pusieron a fabricar la sierra. Esta leyenda es conocida en Bual, Ozcos, Grandas de Salime, etc...” Alberto Alvarez Peña, “Mitología asturiana”

 

 

 

Mari (Euskal Herriak)-Anjana (Cantabria)-Xana (Asturies)

 

“Este vocablo (Mari), que en algunas partes del país significa señora y que en este sentido se aplica al parecer al personaje mítico de que hablamos, va acompañado de la montaña o caverna donde, según las creencias de cada pueblo, suele aparecer el genio” Jose Miguel de Barandiaran, “Mitología vasca”.

 

“Les Xanes tienen la apariencia de mujeres jóvenes, de gran belleza, con cabellera larga y rubia, se aparecen preferente de noche o en torno a la mañana de San Xuan en fuentes o cuevas a las cuales suelen estar vinculadas” Alberto Álvarez Peña, “Mitología asturiana”.

 

“La anjana vive en grutas recónditas que son verdaderos palacios de suelo de oro y paredes de plata”. Polloux Hernúñez, “Monstruos, duendes y seres fantásticos de la mitología cántabra”

 

Mari “se presenta muchas veces en forma de señora elegantemente ataviada, como se nos dice en los relatos de Durango, en los que aparece, además sosteniendo en sus manos un palacio de oro. En igual forma se nos presenta en los relatos de Elosua, de Begoña, de Azpeitia, de Cegama, de Renteria, de Ascain y de Lescun.” J.M Barandiaran, “Mitología vasca”.

 

Las xanas “acostumbran a peinarse con peines de oro y tienen gallinas y polluelos del mismo metal”. A. Alvarez “Mitología asturiana”.

 

“En otra leyenda, que en este momento no puedo localizar, la xana, al igual que la diosa vasca Mari, toma forma de bola de fuego para perseguir a la ladrona”. Ignacio abellá.

 

“De pronto siente calor, un calor muy diferente del que lleva dentro, un calor que quema de verdad, que le quema las manos y los labios y la ropa. Abre los ojos y ve que la joven, que en realidad era una anjana, se ha transformado en fuego para castigarlo por descargar sus cañones sobre los pobres pajarillos del cielo” “La anjana y el cazador” (Cantabria)

 

“Y cuando menos se espera salta la liebre. He aquí, como muestra, el personaje principal de la mitología de Cantabria y Asturias, la “Inxana” o “Ijiana” (personaje parejo a nuestra dama (Mari): “Q´estaban allí unas que les llamaban las ijianas, que tenían unos pechos que se los echaban al hombro, y esas cosas, pero pa meternos mieu a los pequeños cuando eramos así, hacíamos alguna travesura o alguna cosa désas” (Ramón Sordo. Mitología de Asturias y Cantabria entre los ríos Sella y Nansa, 1984). Me trae a la memoria la Diosa neolítica y paleolítica de pechos grandes, agrandados aún más en este caso por la imaginación popular”. Josu Naberan, “La vuelta de Sugaar”.

 

 “Como Ana Quiliana se presenta en Cangues d´onis, y en Ourense se habla del Hada Ana Manana. Incluso la principal divinidad del panteón euskera, la conocida como Mari, la Dama de Amboto, es llamada en algunas leyendas Ana Mari Alberto Alvarez Peña, “Mitología asturiana”.

 

Un pastor que estaba “brañando” encontró junto a la fuente una Xana (hada astur), que como suelen, peinaba sus largos cabellos rubios ensimismada. Tenía junto a ella un deslumbrante, magnifico, cáliz de oro y el pastor codicioso, y en un abrir y cerrar de ojos lo roba y echa a correr monte abajo.

La xana furiosa, lo persigue y el hombre ve cómo una niebla mágica, negra y espesa comienza a envolverlo. Muerto de miedo suplica y ofrece el botín al patrón del cercano pueblo (curiosamente con nombre de tejo y con muchos de estos árboles en sus montes).

 

“¡Santiago de Aguino, valmé que pa ti lo quiero!”, grita con toda su alma. En ese momento el sortilegio se desvanece, la xana se detiene y le dice:

 

“Porque has dicho eso, si no, el mayor pedazo que hubiera quedado de ti no sería más grande que la cabeza de un alfiler

 

(...) En el País Vasco, R.M. de Azkue ha recogido esta historia en la que, en vez de xana, el genio es basajaun, señor de los bosques. Un pastor le roba un candelero y durante la consabida persecución, cerca de la iglesia de San Salvador, dice: “Señor Salvador: le ruego me defienda. Quiero traerle un obsequio”. Comenzó a sonar la campana y Basajaun, no pudiendo continuar, exclama: “da gracias porque ha comenzado a sonar la vieja campana del Salvador”.

Ignacio Abellá, “La magia de los árboles”.

 

Sugaar (Euskal herriak)-culebre (Cantabria)-Cuelebre (Asturies)

 

Cuelebre. “Su aspecto habitual es el de una serpiente de gran tamaño con alas menbranosas como las de un murciélago. Se trata de un culebro, una culebra macho, en multitud de historias este tipo de culebras va creciendo hasta llegar a ser muy viejo entonces crían alas y marchan volando a La Mar Cuayada a custodiar los muchos tesoros que se ocultan en sus profundidades”

 

Culebre. “Muchas de las cuevas que albergan las peñas, roquedales y acantilados de Cantabria están habitadas por una especie de monstruos, entre Dragón y serpiente. Por lo general guardan tesoros de los que escondieron los moros”

 

El nombre Sugaar significa “serpiente macho”, “culebro”. En la región de Ataún se dice que Sugaar atraviesa frecuentemente el firmamento, en figura de una hoz de fuego. Su paso es presagio de alguna tempestad. Se supone que Sugaar habita en regiones subterráneas, de donde sale a la superficie por la abertura de ciertos antros” Jose Miguel de Barandiaran, “Mitología vasca”